TU PROTECCIÓN DIARIA
DURANTE LOS TRATAMIENTOSLos rayos UVA están presentes durante todo el año, en todas partes y en cualquier estación. Incluso en días nublados, estos penetran en la dermis pudiendo provocar daños irreversibles en la piel. Por esta razón es recomendable utilizar una crema con un factor de protección adecuado cada día.Algunos efectos nocivos de los tratamientos (erupciones, inflamación, sequedad, alteración de la barrera cutánea, hiperpigmentación) pueden empeorar con la exposición al sol. Por eso es tan importante proteger tu piel.Elige productos de protección solar hipoalergénicos formulados para pieles sensibles y que tengan un tacto agradable al aplicarlos en tu piel, ya que es importante protegerla cada día.Desde el inicio de tu tratamiento y hasta un año después de su finalización, te recomendamos que utilices un producto de protección solar que incluya filtros UVA y UVB con factores de protección elevados para proteger tu piel debilitada por los tratamientos.Pide asesoramiento a tu médico. Tu médico te indicará en qué momento puedes empezar a aplicar un producto determinado en función del estado de tu piel. En algunos casos, se recomienda evitar estrictamente la exposición al sol de manera provisional.
EN CASO DE UNA EXPOSICIÓN PROLONGADA
• La exposición prolongada es cualquier tipo de exposición continua, como en el caso de actividades al aire libre, pasar tiempo en la playa o en las montañas. En cualquiera de estos casos, debes tomar algunas precauciones.• Evita exponerte entre las 12:00 y las 16:00 h, ya que es cuando el sol alcanza su punto culminante. Sin embargo, si no puedes evitarlo, protege tu piel con ropa (camisetas de manga larga y pantalones), gafas de sol, un sombrero de ala ancha o un gorro.
• Siempre que sea posible, organízate para llevar a cabo cualquier trabajo exterior por la mañana temprano o a última hora de la tarde y trabaja a la sombra. Aprovecha la sombra de sombrillas, edificios, árboles, toldos, etc. para proteger tu piel de la radiación solar directa.
• Elige un protector solar en crema, gel o aceite con SPF 50+ con protección UVA y UVB equilibrada, como los de la gama Anthelios.
• Aplica este producto después de tu hidratante, sin olvidar tus orejas, labios, parte delantera y trasera del cuello, las palmas de tus manos, las plantas de tus pies y, de ser necesario, tu cuero cabelludo, ya que a menudo tendemos a desatender estas zonas.
• Si estás haciendo actividades al aire libre, repite la aplicación cada dos horas en todas las zonas expuestas.
• Descarta definitivamente el bronceado en interiores.