Las 5 reglas de oro
para un tratamiento de belleza óptimo

Un precursor de la vitamina A pura que actúa tanto en la superficie como en profundidad para alisar y unificar la tez y reducir visiblemente las arrugas profundas. ¿Su punto fuerte? Sus excepcionales propiedades sobre los signos clínicos del envejecimiento lo convierten en un excelente aliado antiedad.

Seguir una dieta equilibrada rica en antioxidantes (presentes en los frutos rojos, las manzanas, el brócoli, etc.), ácidos grasos esenciales y oligoelementos, así como adoptar un estilo de vida saludable, ayuda a que la piel mantenga un aspecto joven.

La limpieza no solo retira el maquillaje, sino que también elimina todas las impurezas acumuladas a lo largo del día, como la contaminación, el sebo y el sudor. Los productos para el cuidado de la piel son más efectivos en una piel limpia. Sin este paso crucial, las impurezas obstruirían los poros y asfixiarían la piel, impidiendo que los ingredientes activos contenidos en el producto para el cuidado de la piel cumplieran su función.

Con el cansancio o la edad, la microcirculación de la sangre y la linfa alrededor de los ojos puede disminuir. La piel fina del contorno del ojo revela fácilmente los signos de una vascularización deficiente o un drenaje linfático inadecuado. Esto es lo que provoca la aparición de signos de cansancio, como ojeras o bolsas.

Múltiples factores medioambientales del envejecimiento provienen de la misma fuente de energía que nos da luz y vida: el sol. Los efectos de los rayos UVB se conocen desde hace décadas: quemaduras solares y daños en la piel. Pero los rayos UVB son solo una faceta del envejecimiento inducido por el sol. Los rayos UVA e infrarrojos, presentes todo el año, incluso en tiempo nublado, penetran profundamente en la piel, degradando sus componentes esenciales.